El tratamiento de la otitis media crónica es esencialmente quirúrgico (aunque puede ir precedido de un tratamiento médico en la fase aguda de la enfermedad) y el objetivo prioritario es erradicar la infección, generalmente mediante una timpanoplástia con mastoidectomía (intervención que elimina las lesiones del oído medio incluyendo las de la caja timpánica y las del hueso de la mastoides). El tratamiento de la hipoacusia de conducción es un objetivo secundario a la curación de la otitis media crónica, está relacionado con el tratamiento de sus secuelas a nivel de la membrana timpánica y/o de la cadena de huesecillos o secuelas post-otíticas.