La mayoría de los pacientes responden al tratamiento con carbamazepina u oxcarbazepina. 

En pacientes con manifestaciones clínicas más complejas, a veces con síntomas similares a algunos síndromes neurológicos, trabajamos en colaboración con un neurólogo para realizar el tratamiento más adecuado.   

El tratamiento quirúrgico mediante la descompresión del nervio separándolo de la arteria (descompresión neurovascular) es la  alternativa al tratamiento médico. Dado el riesgo de esta cirugía, está indicada en pacientes con episodios de vértigo incapacitantes, con deterioro manifiesto de su calidad de vida, que cumplen los criterios diagnósticos de la paroxismia vestibular, que no responden satisfactoriamente al tratamiento médico y en los que el lado afecto está claramente identificado.