Prueba objetiva de depistaje o screening auditivo para la detección precoz de la sordera en recién nacidos.

Las otoemisiones acústicas se basan en la energía acústica producida en el oído interno (cóclea) tras un estímulo sonoro registrada en el condducto auditivo externo. Permiten verificar la integridad de la cóclea y se hacen negativas cuando existe una hipoacusia superior a 30 dB.

Las OEA tienen  la capacidad de identificar hipoacusias cocleares con pérdida auditiva superior a 30-40 dB, lo cual ha permitido el desarrollo de los programas de detección precoz de la hipoacusia en los recién nacidos. Pueden ser registradas en prácticamente el 99% de los oídos normales desde el nacimiento, si bien en las primeras horas pueden estar ausentes en bebés en los que posteriormente se normalizarán.

Entre las ventajas de las OEA destaca el ser una exploración fácil y rápida, que no requiere personal especializado para realizarlas ni que el niño esté sedado, siendo además una prueba muy económica. Sólo es necesario colocar un auricular a la medida del conducto auditivo para realizar el registro. La principal desventaja es que no detectan alteraciones en las células ciliadas internas de la cóclea ni en la vía nerviosa auditiva, dando lugar a falsos positivos en niños con neuropatía auditiva